Viajes pagados con apenas ocho pesos, largas jornadas sin seguridad social y tarifas que no cubren ni el combustible: así describen su día a día los conductores de DiDi, quienes decidieron suspender actividades como forma de protesta ante lo que consideran una política laboral abusiva.
Afirman que la plataforma aplica descuentos a los usuarios sin asumir el costo, trasladando la pérdida a los choferes, quienes en muchos casos apenas reciben el 55 % del total del viaje. Además, denuncian que esta práctica impide que sus ingresos sean suficientes para cotizar en el seguro social.
Manuel Durán, integrante de la Unión de Trabajadores por Aplicación (UNTA), acusó a la empresa de evadir sus responsabilidades con el argumento de ser intermediaria tecnológica, sin respetar las leyes estatales en materia de movilidad y derechos laborales.
Los conductores exigen condiciones más justas y señalaron que entregarán sus demandas ante la Subsecretaría de Movilidad, con la expectativa de que las autoridades intervengan para frenar los abusos y garantizar un trato digno para quienes prestan este servicio.
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