El desvío de agua hacia Manzanillo ha afectado severamente a Armería, donde los ejidatarios han iniciado protestas para exigir un reparto más justo del recurso. En medio de estas movilizaciones, el presbítero Jesús Mendoza, párroco del municipio, manifestó su apoyo al reclamo de los campesinos, resaltando que la crisis hídrica impacta tanto el consumo diario como la agricultura, principal fuente de ingresos de la región.
Según Mendoza, la falta de agua no solo altera la vida cotidiana de los habitantes, sino que también ha debilitado la producción agrícola, base económica de Armería. Muchos campos reciben suministro de manera limitada y esporádica, lo que dificulta la siembra y el mantenimiento de los cultivos.
El sacerdote subrayó que su participación en las protestas se centra en acompañar a la comunidad desde su labor pastoral, sin motivaciones políticas. Su objetivo es brindar apoyo moral y animar a los campesinos a defender sus derechos de manera pacífica y organizada, siguiendo principios de dignidad y justicia.
A través de sus redes sociales, Mendoza ha compartido mensajes en los que reafirma la legitimidad de la lucha de los ejidatarios y hace un llamado a mantener la calma ante los ataques y difamaciones que han circulado en línea. Señaló que su compromiso está con la comunidad y con su misión de servicio, no con el protagonismo personal.
Finalmente, el párroco instó a los habitantes a mantener la unidad y la serenidad frente a la crisis hídrica. Destacó que la mejor manera de proteger al municipio es con organización, prudencia y cooperación, para que Armería recupere el acceso equitativo al agua y fortalezca tanto su economía agrícola como la vida comunitaria.



You must be logged in to post a comment Login